Momentos tranquilos


Las pequeñas cosas que luego echamos de menos son las que apenas apreciamos, un paseo tranquilo con tus perros, un baño en una charca helada, pasear por el campo sin oír nada más que los pájaros, las hojas de los árboles y tu respiración. Mancharte la ropa de hierba y tierra cuando te echas en el césped para ver el cielo. Esos momentos tranquilos que apenas se aprecian cuando suceden y luego los echas de menos. En esos momentos estaba yo paseando por el campo con Nala y Rocky cuando vi un chico desnudo nadando en el río. Nala se metió a nadar también, yo le gritaba para que viniese, y de paso miraba al chico. Él dejó de nadar y me saludó. Como Nala no tenía intención de venir hasta que nadase lo que le apetecía, me quedé con Rocky rascándole la tripita.

El chico se acercó a mí, tenía su ropa cerca. La verdad es que estaba muy bien físicamente y se le veía bien dotado. Le miré la polla con descaro, y es que no sé porqué siempre acabo rodeada de hombres desnudos. Al chico parecía que le gustaba que le mirase, me guiñó un ojo. Lo ignoré y me puse a recoger pétalos de flores un un papel. Igual este chico estaría mono con los pétalos pegados a su piel. Lo volví a mirar y no se había secado, las gotas de agua recorrían su cuerpo. Me acerqué un poco, no mucho para que no pareciera que se los iba a echar encima. Solté los pétalos que el viento se encargó de hacerlos llegar a él. Muchos se le quedaron pegados en la piel. Sonreí. Estás hecho una florecilla, le dije. El chico no se tomó muy bien mi comentario y trató de quitarse los pétalos. Me acerqué a ayudarle. Yo te ayudo en la espalda. Él se pensaba que se los iba a quitar, pero empecé a acariciarlos, los deslizaba por su piel. Con tanto pétalo ganas mucho. Arranqué otra flor y la deshojé encima de él.

Ahora se le estaba empezando a poner dura, la polla. Le acaricié entre sus muslos y pasé el tallo por su culito. Él quiso tocarme, puso sus manos sobre mis pechos, le di un tortazo. No, no me toques. ¡Échate sobre la hierba! él se echó desnudo y yo empecé a llenarlo de pétalos de flores. Le iba echando mis babas en el cuerpo y los pétalos, mis babas eran el aglutinante perfecto para que los pétalos se pegaran a él. Estuve horas realizando mi obra, cuando acabé todo él estaba lleno de pétalos y babas. Cada vez que le escupía su polla reaccionaba, se endurecía. De verlo tumbado en la hierba, con la polla dura y lleno de pétalos me dieron ganas de hacerle una paja, empecé a acariciarle la polla, escupí en ella mientras jugaba con sus pelotas empecé a masturbarle, quería ordeñarle, que sacase toda su leche encima de él. Quería pegarle más pétalos con su propio semen. El chico gemía, se retorcía, pero sabía que no podía tocarme. No tardó en correrse echándose la lefa en todo su pecho algo en la cara. Lo cierto es que apunté a la cara pero salió por donde quiso disparada. Le pegué más pétalos y quedó precioso. Le hice varias fotos, un día os las enseñaré.


Mono vaquero: [*SK*] - Lucy - @Sense Event
Gafas: [Cinnamon Cocaine]-Vintage Sunglasses
Pose: [SamPoses] -Blossem 
Pelo: TRUTH - Vivid - Fatpack - Regalo Grupo

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