Día de mudanza


Me puse a pensar en que igual vivía en una casa demasiado grande. No usaba la mitad de la casa y además ya me había sacado fotos en todos los rincones. Hacía tiempo que ya no me interesaba espiar al vecino psicópata, nunca lo vi matar a nadie, era muy aburrido. Cogí a mis perros y fui a ver casas por ahí, esta estaba muy alejada del centro. Me apetecía vivir más cerca del bullicio.

Vi una casa preciosa, no muy grande, con un sótano ideal para montar una mazmorra, rosa claro. Tenía una piscina, una cocina impresionante y varios baños preciosos. Me la quedo, le dije al chico de la inmobiliaria. Lo miré mejor, era guapo y tenía buen cuerpo. Me fui a casa y llamé a todos mis amigos, iba a hacer una fiesta despedida y de paso que me ayudasen a embalar las cosas. Se armó una buena fiesta mucho alcohol y  mucho sexo. Uff pero tenía que hacer la mudanza. Mejor llamo y que me lo hagan. Llamé "por error" al chico de la inmobiliaria. Ais, me confundí. Necesitaba ayuda para la mudanza, le dije. Él insistió en venir, no tenía nada que hacer. Su aburrimiento me beneficia. Le abrí la puerta,  me miró de arriba a  abajo, ni me había cambiado, iba con el vestido de fiesta y además la casa estaba llena de cajas y botellas de alcohol.

Pasamos a un salón donde estaba el piano, me encantan los pianos pero no sé tocarlos. El chico era muy atractivo, se puso a tocar el piano y lo hacía bastante bien. No pude resistirme y me abalancé sobre él, le quité la camisa, el pantalón, los boxers, le agarré la polla mientras le besaba. Lo miré a los ojos y me perdí en ellos. Le agarré los huevos fuerte. Ven que te voy a escribir algo en el culo. El chico me siguió sin rechistar. Le escribí "soy la puta de Yhesy" en el culo. Se puso cachondo perdido, así que aproveché para meterle dos dedos por el culo a modo aperitivo. El chico estaba excitado y yo también, fui a buscar un dildo. Empecé a jugar con el dildo y su culo hasta que se lo metí y lo follé con él. Lo follé en el taburete del piano. A cada grito me excitaba más. Le até las manos, eso me pone a mil.

Mis manos se clavaron en su espalda. Le di unos cuantos azotes que le dejaron la espalda marcada. Sus gritos, su sudor, su excitación me embriagaban. Follé ese culo hasta que me cansé, me senté en el taburete con las piernas abiertas y sin bragas. Ni sé donde las había dejado la noche anterior. Lo empujé a mi coño. Guapo, vas a comerme el coño y me vas a decir a que sabe. Estaba lleno de lefa reseca de la follada que me pegué la noche anterior. El chico lamia sin descanso. Sabe a sexo, me dijo. Que fino era. Sí, a sexo del bueno. Le di una torta para que lamiese mejor. Si vas a ser mi puta tienes que mejorar. Lamió y me corrí en su boca. Le acaricié la espalda suavemente. Él no podía mover las manos, esas manos que tocaban de maravilla el piano. Cogí mis antiguas llaves y le escribí en la espalda "guantazo de Yhesy" gritaba, pero tenía una erección de caballo. Lo solté y me encendí un cigarro. Toca algo al piano y así nos despedimos con honores de esta casa.

Mientras sus manos acariciaban el piano me puse a pensar en todo lo vivido en esta casa, quizás haya sido la mejor forma de acabar con esta etapa. Tiré las llaves con restos de su sangre sobre el piano y nos fuimos a la nueva casa. Por que así es como de inmobiliario guapetón pasó a ser mi puta.




Vestido: [JUSTICE] CRISTAL OUTFIT

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