Asaltada en mitad de la calle

 Había ido de fin de semana a un pueblo de la costa para desconectar un poco de la rutina. El pueblo no era muy grande, tenía casas bajas, de tres alturas a lo sumo y todas de colores diferentes. Lo cierto, es que era bastante pintoresco. Me sorprendió bastante ver un perro rosa atado en mitad de la calle. Cuando me vio se puso contento y movía su rabito. Seguí caminando como si no lo viese, no me gusta jugar con perros ajenos si no están sus dueños. El perro se  acercó y empezó a olisquearme las piernas, la verdad es que me sorprendí de que fuese tan atrevido. Me aparté y le dije que se estuviese quieto. Él se sentó y me miró con ojos tristes. ¿Que haces aquí solo?  Ladró. Supongo que tu dueña está dentro del bar, ¿no? Él negó con la cabeza. ¿Y donde está tu dueña? el perrito se encogió de hombros. Entré dentro a preguntar de quien era ese perro pero nadie sabía nada. Pregunté a lo largo de la calle y no supieron darme respuesta, parecía un perro abandonado.

Fui a por el perro que cuando me acercaba se ponía contento. ¿Te han dado orden de estar aquí quieto?  Él negó. ¿No serás un perro mentiroso verdad? Volvió a negar. Bien, te voy a dar comida y un paseo, pero vamos a buscar a tu Ama, ¿entiendes? Él asintió y caminó a cuatro patas conmigo. La gente me miraba extrañada de verme caminar con un perro rosa. Lo cierto, es que iba a juego conmigo. Un chico que se cruzó conmigo me miró las piernas, miré al chico y sonreí. ¡Mea aquí! señalé una palmera y acerqué al perro a ella. Él levantó la pata y orinó en medio de la calle. El chico me seguía a un poco de distancia, yo me daba cuenta. Me giré y lo miré de nuevo mientras entraba a un bar a por comida para el perro callejero. Saqué un plato y se lo puse en el suelo. ¡Come! Él comió de ese plato llenándose la cara de comida, hacía ruiditos al comer y esos ruidos me excitaban. El chico que estaba cada vez más cerca nos miraba entre excitado y curioso.

¡Ven acércate! Él se acercó y miró al perro comer. ¿Te excita ver a este perro? El chico asintió. ¿Te gustaría ser como este perro? Asintió de nuevo. Vas a empezar por algo sencillo, tócate la polla mientras ves a este perro comer. El chico empezó a tocarse por encima del pantalón mientras el perro relamía si comida. ¡Buen perro! le acaricié la cabeza mientras él trataba de olerme el coño, ese coño húmedo de verlo comer así. Miré la entrepierna del chico y tenía un bulto muy considerable. Bien, ya está, no te toques más. El chico paró y me miró con ojos suplicantes. No no vas a tocarte más. Él perro seguía olisqueando mi pubis. ¿Te excita ver como me huele este perro? El chico asintió de nuevo. Bien yo haré de ti mi perro, un perro bien educado. Enganché mi cadena a su cuello y me llevé a los dos, porque no puedo evitar recoger a los perros abandonados que veo.

 


 Outfit: [adorsy] - Mia SET/NO HEELS - Maitreya/Legacy

Botines:[adorsy] - Mia Heels Fatpack - Maitreya/Legacy

Comentarios

LO MÁS VISTO