Cuidaré tu conejo

Me gusta hacer escapadas a los pueblos de montaña, allí puedes caminar por el campo, respirar aire puro, hablar con la gente y se suele comer bastante bien. Vestí a mi putita con medias de rejilla, un corsé morado y la maquillé divina. Sus labios rosas gritaban por ser besados y es que mi fresita estaba para comerla. Sus pestañas largas y pintadas llamaban la atención, al pasear por ese pequeño pueblo todos la miraban. A mi me llenaba de orgullo que lo hicieran y además me ponía cachonda, no lo voy a negar. Al pasar por una calle en la que habían varios vecinos fuera de sus casas, acerqué mi mano al culo de mi putita y lo azoté. El sonido de mi mano golpear contra su trasero se oyó en toda la callejuela. Los vecinos se quedaron mirando, les sonreí y volví a azotarlo. Se acercó una de las mujeres que estaban barriendo la acera y me dijo que mi puta no podía ir así vestida. ¿Ah, no? ¿Quien lo dice? le pregunté mirando a la señora mientras agarraba los huevos de mi puta y los acariciaba. La mujer agachó la mirada y dijo que era una guarra y un montón de cosas más, me reí. La señora tendría bastantes años y en la puerta de casa había un conejo de peluche rosa. Lo cogí y empecé a jugar con él pero a la mujer se ve que no le hacía mucha gracia y protestaba. 

La mujer para los años que tenía no estaba mal, el pelo blanco y bastantes arruga. Mi puta se quedó mirando las bragas de la señora que se le trasparentaban bajo el vestido. ¿Te excita ver la ropa interior de esta mujer? Mi puta negó con la cabeza pero la polla ya estaba dura. La señora mayor hizo como que se escandalizaba pero en verdad se sintió halagada. Seguramente a su marido hacía siglos que ni se le levantaba. Dame mi conejo, me dijo la mujer tratando de cogerlo. Me reí, a la mujer se le asomaba media teta por los saltos que daba para coger el conejo. Señora, no se ponga nerviosa que yo cuidaré de su conejo. Se lo di a mi putita y me acerqué a la mujer mirando sus pechos caídos. Acerqué mi mano y se los acaricié. ¿Cuanto tiempo hace que no te acarician las tetas? le dije a la mujer mientras las apretaba en mis manos. Me dio un manotazo pero no se apartaba, le gustaba que los tocase. Cogí la mano de mi puta y me acerqué a ella todavía más. Guíe a mi puta bajo el vestido de la señora para que acariciase ese coño tan viejo. La mujer gimió, en sus ojos estaba el conflicto de lo que deseaba y lo que creía que debía ser lo correcto. Mi puta metió sus dedos en el coño de la mujer mientras yo le agarraba de la muñeca fuerte. No quería que dejara a esa pobre mujer a mitad, al menos no tan pronto. 

Yo guiaba a mi puta para que llevase el ritmo, la mujer nos miraba y gemía. Igual ven tus vecinos que en el fondo eres una guarra, le susurré al oído mientras apreté su pecho flácido. La mujer lejos de parar se puso más cachonda. Escupí a mi puta en la cara y miré a la mujer. Seguro que eres de las cerdas que les gusta que les escupan ¿verdad? Ella asintió. Estaba apunto de correrse cuando saqué la mano de mi puta de ese coño. La mujer protestó. ¿Quieres tu conejo vivo? cogí a mi puta por la cabeza apretándolo contra mí. ¿Lo quieres? pregunté a la mujer mientras mi puta le enseñaba su conejo. Si lo quieres vivo, métete dos dedos en el coño ¡ahora mismo! La mujer estaba cachonda perdida pero tenía miedo en los ojos, miedo al que dirán. Si eres una guarra, demuéstralo. Demuestra que tu conejo está vivo. Se metió los dedos en medio de la calle mientras mirábamos y se corrió allí mismo entre gemidos. Bien, tu conejo vive. Le di el conejito y nos fuimos, yo con mi coño húmedo y mi puta con su polla en mi mano. 

 

Tattoo: [Enemy] Salila Tattoo- @ UniK

Outfit:[JUSTICE] SOPHIA OUTFIT  - @FaMESHed

Pose: [B & W] - Pose Bento # 233  (pose con bebidas o sin bebidas) @Pose Fair